No navego en libros, me gustan las lecturas cortas y bien realizadas, me gusta escuchar didáctica vomitada de boca de un erudito.
Tal vez sea haraganería, tal vez sean las horas perdidas en distracciones inútiles.
Mi poco interés al mundo -apatía- lo desperdicio en palabras tontas y tan mencionadas por un ser no pensante.
Veo a perdedores agrediendo mi persona y realizando un circo con malavares pésimamente realizados tratando de absorber atención que no encuentran en si mismos -no existe misericordia para ellos-,y opto por ausentarme a lo trascendental.
¿Mi realidad es real?, podría preguntárselo a Berkeley, la respuesta sería obvia y concluida con poca objetividad, pero es la subjetividad que seduce al crearse la mentira.
- Fotografía:
Victor Ugo Dorantes Rodriguez
Tal vez sea haraganería, tal vez sean las horas perdidas en distracciones inútiles.
Mi poco interés al mundo -apatía- lo desperdicio en palabras tontas y tan mencionadas por un ser no pensante.
Veo a perdedores agrediendo mi persona y realizando un circo con malavares pésimamente realizados tratando de absorber atención que no encuentran en si mismos -no existe misericordia para ellos-,y opto por ausentarme a lo trascendental.
¿Mi realidad es real?, podría preguntárselo a Berkeley, la respuesta sería obvia y concluida con poca objetividad, pero es la subjetividad que seduce al crearse la mentira.
- Fotografía:
Victor Ugo Dorantes Rodriguez
Nuestra tontería es la gracia imposible que buscan en círculos sociales que nacieron con el mismo experimento.
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