Tócame tan suave y desenfrenadamente como una sinfonía en luna llena, puedo sentir mi más bello anochecer con sólo tocar tu piel.
Me oculto entre tus brazos intensamente hasta perder el aliento.
Mi regocijo surge en el acercamiento de tus labios sobre mi espalda, y es ahí cuando mi mente sólo surca hacia tu inquietante mirada.
Haces de cada segundo un delirio perturbante, haces de lo perturbante un apasionado éxtasis de vesanía.
Me oculto entre tus brazos intensamente hasta perder el aliento.
Mi regocijo surge en el acercamiento de tus labios sobre mi espalda, y es ahí cuando mi mente sólo surca hacia tu inquietante mirada.
Haces de cada segundo un delirio perturbante, haces de lo perturbante un apasionado éxtasis de vesanía.
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Con esas palabras, no pude hacer otra cosa mas que cautivarme. Tu extraordinario persona se intensifica, y me alegra que así sea; pues la mayoría de las veces, el encanto de las personas simplemente decae... Eres mi sinfonía que: entre espejos vahosos, la risa de la depravación, y tu carne manifestándose; es perfecta ante sin ninguna audiencia.
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